LVR
Al organizar un evento con personas mayores, principalmente en zonas populosas hemos observado que se les habla como si fueran niños, o como si tuvieran problemas cognitivos o tuvieran discapacidad intelectual cuando no tienen nada de eso.
En estos mismos eventos se contratan payasos y otros personajes utilizados en las fiestas infantiles, algunas personas mayores manifiestan una cierta incomodidad, como me lo refirió una Sra que dijo que se habían equivocado y que la reunión no era una fiesta infantil.
Un enfoque gerontológico desbarata esta falta de respeto y nos señala que debemos exponer contenidos favorables al empoderamiento de las personas mayores, fomentando el pleno ejercicio de la ciudadanía y no solo distraerlos, la alegría y la actividad física son básicas, pero también el conocimiento, hablarles de manera sencilla y clara, si el caso lo amerita, y por supuesto mostrar amabilidad, no subestimemos la capacidad intelectual de los mayores, sepamos comunicar con claridad sin renunciar a los fines fundamentales de una labor gerontológica.
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