Ante la trágica situación de la pandemia, los ojos y oídos de todos soportan una sobrecarga de información monotemática, que finalmente genera más stress, hay que recordar que por más terrible que parezca, esta pandemia pasará, y los grandes temas del envejecimiento y las personas mayores, deben seguir ocupando su lugar, y no solo para referirse a ellos como vulnerables, y centrar el meollo de su existencia en una enfermedad, como ahora sucede.
Hay una preocupación razonable y sincera respecto al virus que nos amenaza, pero también hay un cierto oportunismo de algunos supuestos líderes de opinión, a los cuales les ha caído de perillas la situación que pasamos, para aumentar su popularidad, hay que tomar las medidas sanitarias necesarias e informarnos de lo más importante, pero los cambios sociales acelerados no se detendrán, y contra viento y marea las personas mayores, seguirán creciendo, no solo en número, sino en ejercicio ciudadano, nivel educacional, portando sus derechos, manejando la tecnología, porque es una tendencia irreversible, cada día nuevas personas mayores, se suman sabiendo dominar el mundo digital, el escenario es otro y se modifica a cada paso, la realidad del cambio constante, del cambio acelerado no se detendrá ante ningún virus, por eso hay que seguir capacitándonos en los grandes temas, hacer lecturas variadas, seguir en los grandes temas de la gerontología y cuidando con distraernos mucho, de nuestra labor, a seguir aprendiendo, a seguir entendiendo el envejecimiento y los inevitables cambios.
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